El arte no es hacer "una obra bonita" que se vea bien en casa o en un espacio, ni se trata del mercantilismo/capitalismo de producir piezas que se vendan bien en el mercado y nada más. El arte tiene un propósito, una intención y un compromiso con la sociedad de generar (desde la propia experiencia) nuevos pensamientos en función de la evolución y del cambio de los paradigmas. Sensibilizar y despertar a las masas creando cultura sobre cualquier tema que se considere pero desde una perspectiva singular que produzca una visión más allá de lo meramente aparente.
"Según se és, se crea."
Es imposible desprenderse de quien es al concebir una obra de arte, cada interpretación se construye bajo la mirada y la emoción de cada individuo.
Un artista entrega su vida a encontrar la forma de develar los enigmas que se arraigan en su ser. Es un investigador, un ingeniero de la imaginación y la razón, analizando cada situación que le causa una adictiva curiosidad, esa convicción por cuestionar los esquemas sobre la vida, la muerte, el amor, el sistema, el universo, cualquiera puede ser el tema origen de sus motivaciones para dedicarse perseverantemente a revelar sutilmente el mensaje que sus obras contiene, provocando un efecto en el espectador. No importa si parece "bonita/buena" o "fea/mala" obra, simplemente el generar una reacción, un pensamiento, una emoción , intrínsecamente habrá cumplido con su destino.
Así que, siéntase libre de opinar, de sentir, de aprobar o negar. No importa su posición, no será juzgado por ello, aquí lo importante es ser activos y concedernos este momento para consentir un modo distinto y único de percibir cualquier tipo de arte que se haga presente.