Einstein decía que “el arte es un puente a lo espiritual”, te eleva, te libera, te construye y te conecta desde tu interior, con el universo. Todos nacemos con un potencial artístico y creador para vivir, por lo que la invitación que les traigo hoy, es a contemplar las experiencias incluso de la soledad, el dolor, la nostalgia infinita, las pérdidas que dejan emociones intensas y enaltecen los sentidos. Darles sus tiempos, sus espacios, sentirlas y dejar que la sabiduría se apodere del vacío... Vivir para hacer existir el arte que hay en cada uno, esclareciendo los sentidos en acciones sentipensantes, aprovechando cada perdida como una potencial semilla creadora y liberadora de donde la imaginación cobrara sentido.
No nos dejamos encausar por la exigencia de “una normalidad universal” que cosifica el sentimiento a una pieza decorativa, enalteciendo el ego y reduciendo su valor a lo banal y trivial de vender para existir.
“Cierra tus ojos corpóreos para poder ver tu cuadro con los ojos del espíritu, y haz surgir a la luz del día, lo que has visto en las tinieblas”
Copyright © Corina López De Sousa, 2018
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